En la actualidad los adultos toman probióticos para aliviar problemas digestivos, sin embargo, estos también pueden ofrecer beneficios a los bebés en caso como aliviar el cólico o tratar la diarrea.
Aunque no hay evidencia científica que apoye todas las declaraciones que se hacen a favor de los probióticos.
Por lo tanto antes de comenzar a darle a tu bebé un suplemento probiótico o una leche de fórmula con probióticos añadidos, es necesario consultarlo con el pediatra de confianza.
Solo el pediatra es quien puede evaluar si se puede o no anexar a la dieta de tu bebé los probióticos.
Si te interesa saber en qué casos los probióticos pueden ayudar al bienestar de tu bebé te invito a seguir leyendo este artículo.
¿Casos en los que los probióticos ayudan a los bebés?
En algunas situaciones o malestares los probióticos son capaces de generar mejorías en los bebes, en los casos más destacados que está siendo utilizados:
1-Cólico
Aunque las causas de los cólicos es desconocida, hay expertos que consideran que se presentan gracias a la presencia de bacterias que producen gas y con un cierto bajo nivel de un cierto tipo de bacteria en el tracto intestinal del bebe.
El uso de probióticos pueden reducir los síntomas de cólico al favorecer el crecimiento de las bacterias buenas en los intestinos.
Existen estudios en el que los expertos han visto en los resultados, que los bebe alimentados con leche materna que padecían cólico lloraban por un periodo de tiempo más corto cada día cuando tomaban un suplemento probiótico comparados con bebes que no lo tomaban, a la semana de empezar el tratamiento.
2-Diarrea
En estudios realizados se ha demostrado que si se le da ciertos probióticos a los bebe tan pronto comienzan a tener una diarrea causada por una infección o por antibióticos el curso de la enfermedad se acorta un día.
Aunque no existe una evidencia exacta de que los probióticos puedan prevenir la diarrea en los bebés, muchos especialistas de la salud están de acuerdo con el uso de los mismos.
3- Eczema
En un estudio realizado por especialistas de la salud dieron probióticos a mujeres con historial de eczema durante los últimos meses de su embarazo.
Las madreas amamantaron a los bebes y les dieron probióticos durante seis meses.
Cuando estos bebes que recibieron el tratamiento cumplieron 4 años, se observó que tenían casi la mitad de las posibilidades de padecer de eczema que los bebes que no siguieron este tratamiento.
Probióticos que pueden ayudar a un bebé
Si él bebe presenta casos de cólicos, diarrea u otro malestar, es necesario llevarlo primero al pediatra.
Este descartara una enfermedad seria y podrá comprobar que tan seguro es suministrar probióticos al bebe.
Esto se debe hacer ya que si él bebe tiene el sistema inmunitario comprometido, no es lo más recomendable darle probióticos.
En todo caso si tu pediatra te da permiso de dar probióticos a tu bebe, puedes pedirle una sugerencia sobre qué tipo o cepa de probiótico recomienda.
Muchos investigadores sugieren que el Bifidobacterium breve y el Bifidobacterium longum pueden ayudar a tratar el cólico.
Así como que el Bifidobacterium lactis, Lactobacillus reuteri y Lactobacillus rhamnosus (nombrado también cono LGC) pueden ayudar con la diarrea.
Otra de las cosas a considerar es la dosis que se debe dar, para los bebes y los niños lo que recomienda es una dosis que este entre los 5 y 10 billones de unidades que forman colonias por día, esto es suficiente para establecer la cantidad necesaria de bacterias beneficiosas.
Alimentos con probióticos que podrías darle a tu bebé
Como siempre lo más recomendado antes de comenzar una alimentación con probióticos es consultar con tu médico.
1-El yogur
Es reconocido como una fuente de probióticos estupenda, generalmente a los bebe se les comienza dar a comer yogur tan pronto empiezan a comer alimentos sólidos, generalmente a la edad entre los 4 y los 6 meses.
Se deben usar yogures que indiquen culturas activas, es decir, que estos organismos vivos no han sido destruidos durante el procesamiento del yogur.
Lo más recomendable es que él bebe comience a consumir yogur natural y sin azúcar.
Existen en el mercado otros alimentos que contienen probióticos de manera natural, como:
2-El kéfir
Es un tipo de bebida láctea fermentada como el yogur, es una combinación de bacterias probióticos y levaduras en una matriz de proteínas, lípidos y azucares.
Sus nódulos tienen un aspecto similar al de la coliflor pero es más blando y gelatinoso y están envueltos en una matriz polisacárido, denominada kefiran.
Los principales microorganismos en el kéfir son la bacteria Lactobacillus acidophilus y la levadura (hongo unicelular).
3-Alimentos fermentados o en escabeche
Un ejemplo es el chucrut (col fermentada), o los pepinillos encurtidos que han sido preparados con sal (no con vinagre).
Este tipo de pepinillos son los que generalmente son usados en las hamburguesas, en muchos platos latinos se preparan con vegetales en escabeche. Pero en su mayoría se han procesado en vinagre, no en sal.
4-Sopa de miso
Es una sopa tradicional japonesa, se hace añadiendo una cucharada de miso en agua caliente.
El miso es una pasta hecha de centeno, frijoles, arroz o cebada fermentados, su sabor suele ser muy bueno.
En el caso de usarlo para los bebes, es necesario consultarlo con el pediatra ya que este plato suele ser un poco salado.
5-Pozol
Es una bebida de origen maya que se realiza con maíz fermentado.
En unos estudios realizados por la universidad de México determinaron que contiene probióticos y prebióticos, así como mejor calidad de proteínas que el maíz sin fermentar.
Existen muchas variedades de pozol, el pediatra es quien te dirá si alguno es adecuado para tu bebé.
6-Tejuino
Es una bebida muy antigua elaborada a base de maíz y fermentada, fue preparada por etnias desde las épocas precolombinas.
Tiene altos niveles de bacterias ácido lácticas, algunas con propiedades probióticas haciéndolos muy efectivo en el caso contra la diarrea.
En este caso se debe tener cuidado ya que algunas variedades de tejuino contiene alcohol, los más recomendable es consultar con el pediatra.
Como siempre hay que aclarar que se debe primero consultar con el pediatra que tipo de alimentos puede o no consumir él bebe.
Solo él puede darte este tipo de información de manera segura, para no poner en riesgo la salud del infante.
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